El tiempo en la estructura narrativa
El orden en que contamos los hechos están directamente relacionado con la arquitectura de la narración. Existen varias opciones para variar la sucesión cronológica de los hechos:
1. Narración lineal: es la más antigua y la más sencilla forma de contar. En ella, los acontecimientos se refieren según su orden cronológico natural.
2. Inversión: es el tiempo al revés. El relato empieza por el final, da un salto hacia el pasado y vuelve de nuevo, de forma lineal, al mismo hecho con el que se comenzó.
3. In media res: la narración comienza hacia la mitad de la historia, da un salto en el tiempo hacia atrás para referirnos lo que ha sucedido hasta llegar a la situación presente, y desde ahí sigue su historia.
4. Analepsis o flash-back: la estructura de una narración con flash-back estaría compuesta por una línea de tiempo cronológica desde la que se van dando saltos hacia atrás, para volver de nuevo a esa línea principal.
5. Estructura circular: se cuenta el último hecho cronológico de un suceso (salto hacia el futuro) y después se vuelve hacia atrás (salto hacia el pasado), al momento en que comenzó ese hecho, y se narra linealmente el episodio hasta llegar al hecho anticipado al principio -funciona, a menor escala, como la inversión-.
6. Narraciones múltiples: en estas narraciones, el tiempo de la historia base se detiene para insertar en él otros tiempos distintos e iguales en importancia, llamados historias intercaladas, de las que podemos distinguir tres tipos:
- Narraciones imbricadas.
- Narraciones enmarcadas.
- Narraciones alternas.
"Ya ves tú, lector, que estoy en el buen camino y que de mí depende hacerte esperar uno, dos o tres años la narración de los amores de Jacques..." - Denis Diderot.
Comentarios
Publicar un comentario